Después de casi tres años de litigioDefinitivamente parece que se está cayendo el telón de la guerra legal entre dos de los rostros más famosos de las redes sociales, particularmente en el ámbito de los blogs de viajes.. Dos influencers que se encontraron frente al juez eran muy seguidos por jóvenes y muy jóvenes. Por un lado Piero Armenti, fundador del canal “Mi viaje a Nueva York” que hoy cuenta con más de medio millón de seguidores en Instagram.gracias a lo cual logró un enorme éxito entre el público.
Por otro lado, está Giuseppe Russo, empresario, figura destacada del sector y protagonista de “Mi viaje a Nápoles”.un formato que, ya por su nombre, parece recordar al de su colega de Salerno, aunque centrándose principalmente en la experiencia gastronómica de la capital de Campania. Y es precisamente por la similitud del contenido que surgió la disputa legal entre los dos creadores de contenido.
La polémica, de hecho, empieza con Armenti: según el influencer nacido en 1979, todas las marcas que giran en torno a la fórmula “Mi viaje a” deberían considerarse su marca registrada. Por este motivo, según él, las marcas registradas por Russo con los nombres “Mi viaje a Nápoles” y “Mi viaje a Nápoles” deberían cancelarse.. El juez Leonardo Pica del Tribunal de Nápoles -sección especializada en asuntos comerciales- se pronunció sobre la cuestión, emitiendo una sentencia que traza una clara línea de demarcación en la definición de marcas registradas, creatividad en línea e imitación de formatos narrativos.
En cuanto al primer punto, según la autoridad judicial la expresión “Mi viaje a” tendría carácter descriptivo y por tanto carecería de la fuerza distintiva necesaria para garantizar su exclusividad. Armenti afirma que en 2020, cuando Russo registró su marca, ya poseía dominios web vinculados a la misma fórmula, lo que demostraría un comportamiento de mala fe por parte del demandado. Pero incluso en este caso, el tribunal niega la existencia de delito, porque Armenti no tenía planes para Nápoles y no utilizó el dominio previamente registrado. Por tanto, las marcas registradas por Russo siguen siendo válidas.
La posición del juez sobre el segundo y tercer punto es mucho más clara: creatividad online e imitación de formatos narrativos. De hecho, el Tribunal reconoce que el proyecto de Russo, aunque autónomo en su fórmula, se habría construido mediante métodos de comunicación demasiado similares a los de Armenti. Empezando por el lema “Amigos de mi viaje a Nápoles”, que retoma directamente la expresión que hizo famosa su colega de Salerno con “Amigos de mi viaje a Nueva York”. Y no se trata sólo del lenguaje verbal. El juez enumeró una serie de elementos que, según él, parecen recordar explícitamente las obras realizadas por Armenti: la imagen de portada, la elección de las localizaciones, la estructura de los vídeos y determinados contenidos temáticos. Un conjunto de elementos que, informa Fanpage, el Tribunal interpretó como una “intención sistemática de atribuir notoriedad ajena”.
Tras esta sentencia, el creador napolitano tendrá que eliminar o modificar parte de su contenido online. La orden exige en particular la eliminación de “todos los mensajes/vídeos de la página Facebook Il mio viaggio a Napoli (y de cualquier otra red social vinculada a su actividad) en los que el ruso recita la frase ‘amigos de mi viaje a Nápoles'”, además de contenidos filmados en Nueva York y aquellos relacionados con la promoción de la venta de productos americanos. También existe una penalización de 100 euros por cada día de retraso en la prestación de los servicios.y una segunda multa de 500 euros por cualquier infracción futura, treinta días después de la publicación de la sentencia.