Se ha desatado una batalla por la adquisición del grupo de medios Warner Bros. Discovery: unos días después de que el servicio de streaming Netflix anunciara la adquisición de Warner por 72 mil millones de dólares, el competidor Paramount Skydance interviene con una contrapropuesta, sobre la cual quiere dejar que los accionistas de Warner decidan directamente.
Paramount Skydance ofrece 30 dólares por acción a Warner y quiere pagar el precio íntegramente en efectivo, por lo que la oferta valdría un total de 108.000 millones de dólares. El precio de negociación de Netflix es de 27,75 dólares por acción y se espera que sea casi un 85% en efectivo.
Las ofertas, sin embargo, son diferentes: Paramount quiere hacerse con Warner por completo, mientras que Netflix quiere hacerse con sólo una parte importante. El acuerdo con Netflix incluiría, entre otras cosas, el estudio de cine Warner Bros. y el servicio de streaming HBO Max, pero no algunos canales de televisión como el canal de noticias CNN.
Trump: estará “involucrado”.
Paramount describió su oferta como una “alternativa superior” en un comunicado. Daría a los accionistas de Warner 18.000 millones de dólares más en efectivo y tendrían más posibilidades de obtener la aprobación antimonopolio. El domingo, ante las autoridades antimonopolio, Donald Trump también expresó dudas sobre la venta de Warner a Netflix. El presidente estadounidense afirmó en una conferencia que ambas empresas juntas tienen una cuota de mercado muy grande y que esto podría convertirse en un “problema”. Trump también dijo que estaría “involucrado” personalmente en esta decisión.
Sin embargo, Trump también elogió a Ted Sarandos, copresidente de Netflix, diciendo que le tiene mucho respeto. Sarandos visitó la Casa Blanca la semana pasada. Curiosamente, Trump dice que participará personalmente en la decisión antimonopolio.
Tradicionalmente, los reguladores antimonopolio estadounidenses trabajan en gran medida independientemente de la Casa Blanca cuando revisan propuestas de fusiones. Sin embargo, Trump ha dejado claro en repetidas ocasiones, especialmente en su segundo mandato, que no quiere adherirse a esas costumbres. La semana pasada, varios políticos en el Congreso de Estados Unidos dijeron que vender Warner a Netflix perjudicaría la competencia.
También hubo críticas por parte de la propia industria del entretenimiento. Cinema United, una asociación de operadores de cines, calificó la adquisición como una “amenaza sin precedentes” para el negocio de sus miembros porque Netflix depende principalmente del streaming y estrena sus películas en los cines sólo de forma muy limitada. El Writers Guild of America West, una asociación de guionistas, dijo que la fusión costaría empleos y provocaría precios más altos para los consumidores.
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