Las imágenes de la cámara se muestran demasiado tardeLa policía evitó a los ladrones del Louvre por 30 segundos
En octubre, a plena luz del día, unos ladrones irrumpieron en el Louvre de París con un camión equipado con una plataforma elevadora. Aunque el robo es filmado, ellos escapan con su botín. Un informe de investigación muestra que con mejor tecnología y mejor coordinación se podría haber evitado el millonario robo.
Según un informe de investigación, durante el espectacular atraco a obras de arte en el Louvre de París, la policía y las fuerzas de seguridad no detectaron a los autores, que escaparon durante sólo medio minuto. Con tecnologías de seguridad más modernas y una mejor coordinación los autores podrían haber sido capturados, afirmó el director de la Inspección General de Asuntos Culturales (IGAC), Noël Corbin, al presentar una investigación encargada por la ministra de Cultura, Rachida Dati, sobre la seguridad del museo de fama mundial.
“Solo quedaban 30 segundos; de lo contrario, los agentes de seguridad o de policía en el coche podrían haber impedido que los ladrones escaparan”, dijo Corbin al Senado de París. El centro de control del museo debería haber informado del robo más rápidamente y haber proporcionado a la policía y a las fuerzas de seguridad del museo información más detallada sobre el lugar del robo. La policía sólo se enteró de un intento de robo y primero se dirigió en una patrulla hasta la entrada principal del museo, antes de regresar.
No transfiera imágenes de vídeo directamente
Como muestra el informe de la investigación, una cámara de vigilancia grabó a los delincuentes que aparcaban un camión con plataforma elevadora junto al museo, entraban al museo por un balcón en el primer piso y luego huían con su botín. Sin embargo, no hubo transmisión directa de estas imágenes de vídeo al centro de control. El personal de seguridad vio las grabaciones sólo cuando los delincuentes ya se habían marchado.
Según el informe, los controles de seguridad realizados hace años tampoco fueron transferidos a la nueva dirección del museo, que asumió el cargo en 2021. Una auditoría realizada por la empresa francesa de joyería de lujo Van Cleef & Arpels en 2019 ya había identificado todos los puntos débiles de la galería Apollon, donde los perpetradores irrumpieron. Probablemente la nueva dirección del museo no estaba al tanto de esta comprobación.
Tras el ataque relámpago del 19 de octubre, los cuatro presuntos principales autores se encuentran ahora en prisión preventiva. Se ha abierto una investigación contra ellos por robo relacionado con bandas y pertenencia a organización criminal. Continúan las investigaciones sobre posibles clientes y los antecedentes del crimen. No hay rastro del botín valorado en unos 88 millones de euros.