Donald Trump firmó una orden ejecutiva destinada a centralizar la regulación de la IA a nivel federal, con el objetivo de impedir que los 50 estados de EE.UU. lo hagan a nivel nacional. “Queremos tener una única fuente de autorización”, dijo. “Estamos muy por delante de China. China lo sabe. Y no hacerlo sería el mayor regalo que se le haría”, añadió. La orden tiene como objetivo “garantizar que la IA pueda operar dentro de un marco regulatorio único, en lugar de estar sujeta a regulaciones estatales que podrían paralizar la industria”, explicó Will Scharf, jefe de gabinete de la Casa Blanca. Se han adoptado más de 100 leyes en una treintena de estados americanos.
Apenas unas horas después de asumir el cargo, Trump revocó una orden ejecutiva de Joe Biden sobre la seguridad de la IA, que exigía que las empresas proporcionaran al gobierno federal los datos de sus modelos y los resultados de las pruebas sobre cualquier “riesgo grave para la seguridad nacional, la seguridad económica nacional y la salud pública”.
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