“La investigación biomédica como instrumento de seguridad nacional” es el título de la conferencia en la que la Fundación Enea Tech y Biomedical reunió hoy en Roma al mundo de la biotecnología, la investigación científica y el sector farmacéutico. Tres paneles comparativos, sobre las relaciones entre investigación y mercado, sobre el valor estratégico de los polos de innovación y sobre los vínculos entre investigación, industria e instituciones, que fotografiaron un ecosistema biomédico nacional cada vez más sólido y autónomo.
A continuación, el presidente Giovanni Tria habló de la difícil fase inicial de la Fundación, que culminó con su colocación, en 2024, como primer inversor público de capital riesgo con más de 91 millones de euros invertidos en 17 start-ups, spin-offs universitarias y PYME, y en 3 proyectos de investigación industrial, así como con el lanzamiento de 7 proyectos en centros de innovación.
Las actividades se centran en áreas terapéuticas clave, desde oncología hasta neurociencia, desde patologías cardiovasculares hasta diagnóstico avanzado.
“Covid nos ha demostrado que la velocidad de respuesta depende de una investigación biomédica sólida y sostenida en el tiempo. Los recursos están disponibles, pero necesitamos actores y una estrategia – declaró el presidente Giovanni Tria -. La Fundación nació para llenar un vacío y reducir la dependencia del país de tecnologías críticas.
El Ministro de Empresa y Made in Italy, Adolfo Urso, también presente con un mensaje en vídeo, destacó la importancia del sector: “Las cifras muestran un sector biomédico sólido, capaz de generar tecnologías indispensables para otros sectores estratégicos.
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