La Cámara de Representantes de Estados Unidos en Washington DC decidió que el número de soldados estadounidenses en Alemania no debería ser inferior al mínimo. Con ello se pretende garantizar el efecto disuasorio del ejército estadounidense.
Los legisladores estadounidenses de la Cámara de Representantes votaron el miércoles a favor de un amplio proyecto de ley de defensa que limitaría la retirada de tropas prevista en Europa. El borrador de más de 3.000 páginas estipula, entre otras cosas, que el gobierno del presidente Donald Trump no puede reducir a largo plazo el número de tropas estadounidenses en Europa por debajo de 76.000. El proyecto de ley pasa ahora al Senado.
Según el Pentágono, aproximadamente 100.000 soldados estadounidenses estuvieron recientemente estacionados en Europa. De ellos, 65.000 tenían empleo permanente y el resto por rotación. Según la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA), el gobierno estadounidense podría reducir el número a menos de 76.000, pero no durante más de 45 días.
El líder republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, afirmó que esta y otras directrices garantizarán que el ejército estadounidense “siga siendo el más letal del mundo y pueda disuadir a cualquier adversario”.
La ley también obligaría al secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, a ser más transparente. La ley exige que el autoproclamado “Secretario de Guerra” entregue al Congreso imágenes de video de los ataques estadounidenses a buques sospechosos de narcotráfico en el Caribe y el Pacífico Oriental. Como medio de cabildeo, se espera que una cuarta parte del presupuesto de viajes de Hegseth permanezca congelado hasta que se apruebe.
La ley, aprobada cada año por el Congreso, prevé un presupuesto de defensa de alrededor de 901 mil millones de dólares (770 mil millones de euros) para 2026, 8 mil millones de dólares más de lo que solicitó la administración del presidente Donald Trump en mayo.
Los requisitos relativos a Ucrania son controvertidos entre los republicanos de Trump: la NDAA proporciona alrededor de 400 millones de dólares para la compra de armas estadounidenses a Kiev el próximo año.
dpa/jac