diciembre 10, 2025
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Después del desastre, las preguntas. Las catastróficas inundaciones que devastaron la isla de Sumatra, en el norte de Indonesia, a finales de noviembre han alimentado acalorados debates sobre las deficiencias en la gestión ambiental. Las consecuencias de Se denuncia especialmente la deforestación.

Las inundaciones provocadas por las lluvias torrenciales debidas al ciclón tropical Senyar han dejado 961 muertos y 293 desaparecidos, según el informe provisional de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB) de este miércoles 10 diciembre y desplazó a 1 millón de personas. En las redes sociales han circulado imágenes de pueblos derribados por las inundaciones, como durante un tsunami o un terremoto, y montones de troncos de árboles, algunos incrustados en lo que queda de casas.

“En muchas zonas afectadas, los residentes de las aldeas informan que las inundaciones arrastraron no sólo barro y agua, sino también troncos y trozos de madera enteros: evidencia física clara de que bosques aún en pie y árboles recientemente talados estaban en la cuenca y se convirtieron en cargas móviles, aumentando considerablemente el poder destructivo de las inundaciones”.descifra Fithria Edhi, una investigadora y activista medioambiental indonesia que vive en Banda Aceh, la capital de la provincia gravemente afectada por las inundaciones en el norte de Sumatra.

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