En sólo seis meses, se embolsaron hasta 30 millones de euros a expensas de la Ópera de Santa María del Fiore, una organización sin ánimo de lucro que gestiona la catedral del mismo nombre, el campanario de Giotto y el baptisterio de San Giovanni, que se han convertido en el símbolo de la ciudad de Florencia.
El hallazgo fue realizado por la policía que, desde primeras horas del alba, se detuvo en las provincias de Brescia, Milán, Bérgamo, Lodi, Prato, Rieti y Vicenza. nueve personas, incluidos ciudadanos italianos, albaneses, chinos y nigerianos. Todos están bajo investigación por los delitos de emisión de facturas por transacciones inexistentes, blanqueo de capitales y autoblanqueo. También se están realizando búsquedas contra numerosas empresas implicadas en el circuito de facturas falsas y blanqueo de capitales. También hay otro sospechoso, actualmente imposible de rastrear.
La Ópera de Santa María del Fiore, organización sin fines de lucro víctima de una estafa millonaria descubierta por la policía estatal, es responsable de la conservación de la Catedral de Florencia y del campanario de Giotto, así como, desde 1777, del Baptisterio de San Giovanni, y, desde 1891, de la gestión del Museo de la Ópera de Santa María en Fiore, creado para albergar las obras de arte que fueron retiradas de la catedral y del baptisterio a lo largo de los siglos.
La Ópera, fundada por la República Florentina en 1296 con la participación de las autoridades eclesiásticas de la ciudad para supervisar la construcción de la nueva Catedral y su Campanario, ha asumido el carácter de organización sin fines de lucro desde 1998 y persigue, entre sus objetivos institucionales, “la protección, promoción y valorización, en las funciones religiosas, civiles, culturales e históricas de la Catedral de Santa María del Fiore, así como de todos sus demás monumentos y edificios”.