Un factor de presión adicional para Ucrania en guerra. Según el instituto de investigación alemán Kiel, la ayuda militar a Ucrania podría alcanzar su nivel más bajo en 2025.
“Según los datos disponibles hasta octubre, Europa no ha logrado mantener el impulso del primer semestre de 2025”subraya en un comunicado Christoph Trebesch, jefe del equipo que enumera la ayuda militar, financiera y humanitaria prometida y entregada a Ucrania desde febrero de 2022. Según el investigador, el riesgo es incluso que este año sea el año en el que Kiev reciba “Menos asignaciones de ayuda nuevas” desde el comienzo de la guerra.
La asignación más baja desde 2022
En detalle, en los diez primeros meses de 2025 (hasta octubre), se asignaron a Ucrania 32.500 millones de euros en ayuda militar. El instituto estima que los aliados de Ucrania deberían asignar más de 5 mil millones de euros antes de fin de año. De modo que la asignación global sería equivalente a la de 2022, es decir, 37.600 millones de apoyo militar en 2022.
Si este fuera el caso, la ayuda militar proporcionada a Kiev sería la más baja desde el comienzo de la guerra. Y la preocupación por esos 5.000 millones prometidos ya se hace sentir porque de julio a octubre la suma sólo alcanzó los 2.000 millones de euros al mes. Tenga en cuenta que la ayuda militar promedio a Ucrania fue de 41,6 mil millones pagados anualmente, entre 2022 y 2024.
Los Estados Unidos de Donald Trump se han reducido
En 2025, Kiev vio sacudida su base de países contribuyentes. El Instituto Kiel indica que hoy la ayuda militar la asigna principalmente Europa, mientras que Estados Unidos se ha reducido en gran medida, bajo el liderazgo de Donald Trump. Sabiendo que antes de su regreso a la Casa Blanca, Washington había proporcionado más de la mitad de la ayuda militar del país. Si bien los europeos consiguieron al principio compensarlo, desde principios del verano han fracasado, señala el instituto.
Francia, Alemania y el Reino Unido, tres firmes partidarios políticos de Kiev, han duplicado, e incluso triplicado, sus respectivas contribuciones militares. Por otro lado, el apoyo de Italia disminuyó un 15% y España no comprometió nueva ayuda militar en 2025. Los países nórdicos (Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia) siguen siendo sólidos contribuyentes en proporción a su PIB, con un aumento de sus esfuerzos en 2025.
Presión presupuestaria de los países de la UE
¿Qué explica la disminución del apoyo militar a Kiev este año? Según Cyril Bret, experto asociado en geopolítica y defensa del Instituto Montaigne, entran en juego dos factores específicos. “A cambio de la ayuda concedida a Ucrania por la anterior administración presidencial, la de su rival Joe Biden, Donald Trump pidió una compensacióncreer. Ha reducido el volumen y la naturaleza de la ayuda a Ucrania para obligarla a hacer las concesiones que quiere de Rusia para llegar a un acuerdo de paz..
Por otro lado, según el experto, varios países europeos que forman parte de la coalición de voluntarios lanzada en 2025 están atravesando dificultades económicas y presupuestarias. A la cabeza encontramos a Francia y Reino Unido. “Esto redujo mecánicamente la ayuda a Ucrania”preciso. Antes de añadir que en este sentido esta reducción por parte de la UE no tiene relación “Fatiga europea por apoyar a Kiev, a pesar de la duración del esfuerzo bélico”..
Un descenso que se espera que continúe hasta 2026
A pesar de este voluntarismo europeo, en 2026 la tendencia no debería mejorar, según Cyril Bret: “Ucrania se está preparando para una nueva reducción del apoyo financiero y militar de Estados Unidos. Ésta es la estrategia explícita de la administración Trump. Pero esta reducción no puede ser completamente compensada por los aliados de la coalición de los dispuestos”.
En consecuencia, subraya, el año 2026 corre el riesgo de ser tan “un año crítico para Ucrania”bajo doble presión militar rusa y política estadounidense. “Los europeos son conscientes de ello y están intentando encontrar el acuerdo de paz menos desfavorable con la administración Trump”.
Los activos rusos congelados en el centro de los debates
Por eso la Comisión está considerando seriamente el uso de los activos del banco central ruso congelados en la UE. Es decir, un premio mayor de 200 mil millones de euros que podría financiar un “mega” préstamo de Bruselas para Kiev. El objetivo es liberar una cantidad inicial de 90 mil millones de euros, durante la cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno prevista para el 18 de diciembre.
Pero hay un problema: este complejo proyecto, según el cual la institución financiera Euroclear presta dinero a la UE, que a su vez se lo presta a Kiev, choca con una resistencia muy fuerte de Bélgica, que teme represalias de Rusia.
En este sentido, el experto asociado del Instituto Montaigne destaca el riesgo de este método: “Pasar del congelamiento a la confiscación de activos rusos expondría a Bélgica y a la Unión Europea a cierto descrédito en los mercados financieros internacionales”. Porque, observa, una de las grandes fortalezas de la UE es la seguridad jurídica de la que disfrutan las inversiones financieras. Una posición que permite a la UE distinguirse de China, Estados Unidos o Turquía.