Las cantidades de cocaína incautadas por las autoridades francesas ya han superado el récord del año pasado con un total de “más de 70 toneladas en el mes de septiembre”, anunció el jueves el jefe de la oficina antinarcóticos (Ofast).
En declaraciones a Radio Caraibes (RCI), Dimitri Zoulas, de viaje en Martinica, recordó que en 2024 todos los servicios de policía, la gendarmería pero también la marina se incautaron de “54 toneladas de cocaína”, con un aumento del “130%” respecto al año anterior, que ya era un récord con “23 toneladas”. “En 2025 esperábamos un respiro, pero en septiembre ya estábamos en más de 70 toneladas”, afirmó.
El director de Ofast precisó que “cerca de la mitad (de esta cantidad), un poco más, pasó por la zona del Caribe antes de ser interceptada en otro lugar”.
Dimitri Zoulas afirma que “la producción mundial de cocaína alcanza actualmente las 4.000 toneladas”. “Se baten todos los récords. Al tener el producto tan disponible, se exporta desde las zonas de producción, principalmente Colombia, Perú y Bolivia, en todas direcciones y por supuesto a las Antillas”, continuó. Ante tal “abundancia de producción”, señaló “una multiplicación de redes capaces de importarla en grandes cantidades” y como corolario de las incautaciones por parte de las autoridades.
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Cuando se le preguntó sobre los ataques estadounidenses a embarcaciones venezolanas sospechosas de participar en el narcotráfico, Dimitri Zoulas observó que “el narcotráfico es parte de la geopolítica global”.
Pero, añadió, “de ello se deduce que ningún país europeo, ni siquiera Francia, en la situación actual, enviará información operativa a los estadounidenses si pudieran basar un ataque militar en un barco”. “La pregunta no ha surgido”, dijo, antes de continuar: “pero si surgiera, no transmitiremos información”. “Es una postura europea”, insistió.
El jefe de Ofast subrayó, sin embargo, que “los estadounidenses no están en todas partes”. “Por el momento tienen vigilancia y ataques a embarcaciones que se dirigen hacia Estados Unidos”. “Estos barcos no nos preocuparon especialmente, nuestro ámbito de acción es geográficamente diferente”.
Desde septiembre, Estados Unidos ha lanzado una serie de ataques en el Caribe y el Pacífico contra buques acusados de transportar drogas, matando a un total de 76 personas.