Peter Greene, actor estadounidense conocido por el público en general por sus papeles de “villanos” en películas de culto como “Pulp Fiction” y “La Máscara – De cero al mito”, fue encontrado muerto la tarde del viernes 12 de diciembre en su apartamento del Lower East Side de Manhattan. Tenía 60 años. Su manager Gregg Edwards confirmó la noticia al New York Daily News.
Según informes policiales, Greene fue encontrado inconsciente en su casa de Clinton Street alrededor de las 3:25 p.m. y fue declarado muerto en el lugar. Hasta el momento, las autoridades han descartado cualquier signo de violencia; las causas de la muerte se establecerán tras examen médico. “Era una persona extraordinaria”, dijo Edwards. “Uno de los grandes actores de nuestra generación. Tenía un corazón enorme. Era un gran amigo y lo extrañaré mucho”. El gerente dijo que Greene iba a comenzar a filmar un thriller independiente llamado “Mascots” junto a Mickey Rourke en enero. La noticia de su muerte también conmocionó profundamente al director y guionista de la película, Kerry Mondragón.
Greene se había ganado una sólida reputación en la década de 1990 como intérprete de personajes oscuros e inquietantes. El papel de Zed, el sádico guardia y asesino en serie en “Pulp Fiction” (1994), de Quentin Tarantino, es inolvidable, al igual que el del cruel gángster Dorian Tyrell en “La máscara – De cero al mito” (1994), junto a Jim Carrey y Cameron Diaz, considerado por muchos su mejor trabajo.
A pesar de su reputación de actor difícil, Edwards lo describe como un perfeccionista capaz de darlo todo en cada actuación. Durante su carrera, ha trabajado con algunos de los directores y actores más importantes de Hollywood, sumando aproximadamente 95 créditos en cine y televisión. Otros títulos conocidos incluyen “Los sospechosos habituales”, “Trampa en las Montañas Rocosas”, “La esposa del hombre rico”, “End of the Line”, “Deadly Plot”, “Leyes de la gravedad”, “Clean”, “Shaven”, “Blue Streak” y “Training Day”.
Nacido en Montclair, Nueva Jersey, el 8 de octubre de 1965, Peter Greene vivió una adolescencia marcada por grandes dificultades. Huido de casa a los 15 años, vivió en las calles de Nueva York, cayendo en el vórtice de las drogas, como contó en una entrevista a la revista “Premier” en 1996. Tras un intento de suicidio ese mismo año, entró en rehabilitación para superar sus adicciones. “Luchó contra sus demonios y los venció”, recuerda el directivo. (por Paolo Martini)