Un pedazo de la historia estadounidense está a la venta: la antigua casa de la infancia de Donald Trump está a la venta por 2,3 millones de dólares después de una extensa renovación.
En el barrio neoyorquino de Queens hay una casa con un pasado especial: Donald Trump pasó su infancia en esta propiedad Tudor de 1940. La casa de cinco habitaciones, construida por Fred, el padre de Trump, se considera la primera casa familiar de los Trump en el próspero barrio. Según el Wall Street Journal, la propiedad recientemente renovada se ofrece ahora por 2,3 millones de dólares (unos 2 millones de euros).
La casa de los padres de Trump en venta: 2 millones de euros por la propiedad neoyorquina
Sin embargo el viaje fue largo; la casa había estado abandonada durante años. En febrero de 2025, el empresario Tommy Lin compró el edificio por 835.000 dólares (unos 720.000 euros) y lo renovó por completo en un proyecto de ocho meses. “No era habitable: no había agua ni electricidad”, dijo Lin al Wall Street Journal. Manteniendo la característica fachada de ladrillo, el interior ha sido completamente reconstruido.
La propiedad había cambiado de manos varias veces en años anteriores. El día de las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016, un inversor compró la casa por 1,39 millones de dólares (unos 1,2 millones de euros) para revenderla con un beneficio de 750.000 euros justo a tiempo para la toma de posesión de Trump. Posteriormente, el edificio sirvió brevemente como Airbnb, lleno de recuerdos de Trump y una copia de su libro “The Art of the Deal”.
Hoy Lin se centra en la combinación de valor histórico y posición exclusiva. Él mismo ha invertido alrededor de 500.000 dólares (unos 430.000 euros) y espera atraer compradores que aprecien tanto el legado político como los precios inmobiliarios de Jamaica Estates. Las propiedades en la zona se comercializan cada vez más por encima de los 3 millones de dólares.
Distrito en transición: las cosas han cambiado desde la infancia de Trump
El propio Trump dijo una vez del barrio de Jamaica Estates que era “un oasis”: tranquilo, seguro y familiar. El distrito, de hecho, ha sufrido cambios demográficos a lo largo de los años. Un artículo del New York Times de 2015 lo describió de esta manera: “Jamaica Estates, donde Trump pasó su infancia, era un lugar exclusivo y casi enteramente blanco”.
Y además: “Se resistía a los forasteros y en gran medida era inaccesible a las minorías”. Un marcado contraste con el Queens de hoy, que es una de las regiones con mayor diversidad étnica de Nueva York.
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