Como se había agotado toda la cuota de sustituciones, el United se vio obligado a terminar el partido con diez jugadores. Esta condición fue uno de los factores que hizo que los Spurs lograran igualar el marcador 2-2 al final del partido.
Tras el partido, Rubén Amorim dio una breve actualización sobre el estado de su equipo.
“Tenemos que comprobarlo primero, parece que hay un problema, pero aún no sabemos qué tan grave es”, dijo Amorim a TNT Sports.
El técnico de 40 años también valoró el espíritu de lucha de su equipo, aunque tuvo que perder jugadores en el último minuto.
“Es un poco decepcionante, pero estoy orgulloso de la reacción de los jugadores tras el segundo gol del Tottenham. Este es sólo el comienzo de nuestro proceso de construcción de un equipo fuerte”, añadió.
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