¡El eterno retorno! N’Golo Kanté siempre vuelve. A menudo por la puerta principal. A veces una puerta. Sin ruido, sin ruido, pero con esa misma constancia desarmante. El 6 de noviembre, Didier Deschamps volvió a colocar su nombre en la lista de los Bleus, gracias a un giro del destino: la lesión de Aurélien Tchouaméni en el muslo izquierdo, que se suma al paquete de Adrien Rabiot.
A sus 34 años, el centrocampista del Al-Ittihad (64 partidos) regresa al grupo francés por primera vez desde el 14 de noviembre de 2024 y el empate contra Israel (0-0), donde lució el brazalete. El técnico incluso le considera titular este jueves ante Ucrania. “Hablo con NG, está en su mejor nivel en los partidos que le veo jugar”, explica Deschamps. Más allá de los kilómetros y las estaciones, el vínculo está intacto. Porque si Deschamps ha favorecido a los “perfiles más jóvenes” en los últimos meses, la idea del regreso de Kanté nunca ha dejado de flotar en el aire, si fuera necesario.